Rusia ha asegurado que seguirá adelante con sus planes para suministrar a Catar sistemas de defensa antimisiles de última generación como S-400.
“En cuanto a los sistemas de defensa aérea S-400 y demás, están en marcha algunas conversaciones, aunque no hay todavía una conclusión concreta” indicó el embajador de Rusia en Doha (la capital del Catar), Nurmakhmad Kholov, en una entrevista concedía el sábado a la agencia TASS.
El diplomático, sin embargo, informó que durante la reciente visita del ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigu, a Doha, los dos países firmaron un acuerdo para entregar varias armas avanzadas a Catar, entre ellas, los misiles antitanque Kornet-D.
“Se firmó un acuerdo sobre cooperación técnico-militar en octubre de 2017 (…) para el suministro de armas convencionales, por ejemplo, armas pequeñas, fusiles de asalto Kalashnikov, lanzagranadas y ametralladoras, así como los sistemas de misiles antitanque Kornet-D”, ha indicado.
Estos comentarios se producen pese a que Arabia Saudí ha advertido que la adquisición del S-400 por parte de Doha pondrá en peligro sus intereses de seguridad, y ha amenazado con tomar medidas militares contra Catar.
El pasado enero, el embajador de Catar en Rusia, Fahad bin Muhamad Attiyah, también confirmó que Doha estaba en conversaciones “avanzadas” con Moscú sobre la compra de sistemas de defensa aérea rusos.
Las tensiones entre Arabia Saudí y Catar se agravaron en junio de 2017 con la decisión de Riad, secundada por los Emiratos Árabes Unidos (EAU), Baréin y Egipto, de cortar relaciones diplomáticas con Doha, tras culpar al Gobierno catarí de apoyar a grupos terroristas y, por ende, desestabilizar la región. Las autoridades cataríes han rechazado esa acusación.
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